Pedofilia

La sintomatología esencial de la pedofilia son fantasías sexuales recurrentes y altamente excitantes, impulsos sexuales o comportamientos que implican actividad sexual con niños (13 años o menos) durante un período no inferior a los seis meses.

Por lo general los niños suelen tener entre 12 y 13 años y el individuo ha de tener por lo menos cinco años más que el niño para que sea considerado trastorno. La persona ha actuado de acuerdo a estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada por ellas (Según DSM IV TR).

La definición del manual Diagnóstico y estadístico de las enfermedades mentales (DSM IV TR) lleva implícita la concepción clásica, pero resulta una definición bastante acotada. Es posible ver conductas pedofílicas menso marcadas y de personas que no sufren un malestar significativo por padecer de este trastorno.

Algunos investigadores han propuesto la teoría que este trastorno se da principalmente en personas que están a cargo del cuido de niños por lo que cabría la hipótesis según la cual el contacto permanente con niños favorecería la manifestación pedofílica. La propuesta de estos investigadores quizás está influenciada por los medios de comunicación que le han dado mucha publicidad a los casos de pedofilia principalmente ligado con religiosos y con internados; pero no se tiene una estadística confiable de la cantidad de pedófilos circulando las calles.

Perfil del Pedófilo

Aunque no existe un perfil exacto del pedófilo, se ha podido establecer un retrato a partir de los que ya han sido detenidos.

El retrato es el siguiente:

• En más del 90% de los casos se trata de varones.

• En el 70% de los casos superan los 35 años.

• Suelen ser profesionales calificados.

• Con frecuencia buscan trabajos o actividades que les permitan estar cerca de los niños.

• Su nivel social es medio ó medio-alto.

• En el 75% de los casos no tienen antecedentes penales.

• Su nivel de reincidencia es altísimo, aún después de ser descubiertos y condenados.

• No suelen ser conflictivos en la cárcel y muestran bien comportamiento.

• No reconocen los hechos ni asumen su responsabilidad.

• Normalmente tienen una familia a su cargo, y con frecuencia tienen hijos pequeños.

• En más del 30% de los casos se trata del padre, el tío o abuelo de la víctima.

• Generalmente tienen fuertes convicciones religiosas.

La personalidad del pedófilo

La personalidad del agresor de mediana o mayor de edad es de un individuo solitario y con dificultad para establecer relaciones heterosexuales normales, suelen tener baja autoestima, con pocos recursos para enfrentar situaciones de estrés y frecuentemente abusa del alcohol y/o sustancias.

Por lo general no presenta trastorno psicopatológico, sin embargo, se ha visto que 2/3 de los reclusos pedófilos maduros llevaron a cabo esta conducta en momentos que sufrían situaciones estresantes.

Los pedófilos más peligrosos

Son ciertamente aquellos en los que los niños confían pro naturaleza, como un criado, un amigo de la familia o aquellos que el niño idealiza por sus funciones como un sacerdote un profesor un bombero, un policía, etc.

El acto perverso de estas personas insospechadas deja cicatrices profundas en la psique del niño bajo la forma de culpa y de angustia.

Los pedófilos menos peligrosos

Son desde el punto de vista psicológico, los marginales, los exhibicionistas de la calle. Estos actúan desde fuera compulsivamente y después son castigados y encarcelados, con gran alivio reparador para el menor.

¿Cómo actúa el pedófilo para conseguir su presa?

Los pedófilos actúan de diversas maneras para conseguir niños y niñas, con la finalidad de abusar de ellos, integrados en una red de prostitución infantil o para elaborar pornografía.

Conocer su forma de actuar es fundamental para mejorar la seguridad de los menores.

Su acercamiento a los niños suele ser físico. Tras el primer contacto cuidadoso, para no asustar no levantar sospechas comienza a coger al menor, a abrazarlo, mimarlo.

Les invita e incluso les colma de atenciones y regalos para generar en ellos un sentimiento de deuda. A los niños se les enseña que deben ser agradecidos y corresponden a los adultos (por educación) y los pedófilos se aprovechan de esta circunstancia.

Buscan estar a solas de alguna manera con el niño o la niña para ir a más. Los violadores de niños siempre quieren más. Muchos de ellos tienen un nivel bajo de autoestima y se sienten mucho más seguros con los menores.

Otros en un porcentaje elevado, han sufrido abusos de pequeños.

Un tercer grupo lo que busca es humillarlos y doblegarlos, posiblemente por haber sufrido antes desprecio de otros niños o niñas durante la infancia.

Los lugares más comunes donde actúan los Pedófilos

1. En las salas de juegos recreativos: algunos pederastas frecuentan estás salas para después de seleccionar un menor, ofrecerle a pagarle algunas partidas o retarle a jugar contra él. Los abusos no se producen en el primer encuentro, ya que los pederastas normalmente intentan ganarse primero su confianza. Otros invitan al menor a una hamburguesa o se ofrecen llevarlos al cine.

2. Las zonas marginales de la ciudad: Algunos pedófilos prefieren frecuentar las zonas deprimidas para buscar niños o adolescentes desatendidos o con muchas carencias. Les ofrecen entonces algún tipo de trabajo o les aseguran dinero fácil.

3. Salida de los colegios y parques: lugar también en donde actúan con cautela, primero escogiendo a la víctima y luego con cualquier pretexto abordarla para luego buscar cómo hacerse amigo y poco a poco ir pasando a más.

4. A través de Internet: se trata del último sistema que están utilizando muchos pedófilos y que trae de cabeza a policías de medio mundo. Estos se introducen en las “salas de chat” haciéndose pasar por niños o niñas en busca de nuevos amigos. Intentan así conocer la situación de algunos menores, sus gustos y aficiones, hasta que llega el momento de concertar una cita para conocerse.

5. En casa: al menos 1 de cada 3 abusos sexuales sobre menores se comenten en el entorno familiar, por parte del padre, tío o un abuelo.

6. Los centros religiosos, donde los sacerdotes abusan de los niños que asisten a sus iglesias.

Causas de la Pedofilia

Poco se sabe de las causas, pero se dice que una de ellas es el aprendizaje de actitudes negativas hacia el sexo con experiencia de abuso sexual durante la niñez, sentimientos de inseguridad y autoestima baja, con dificultad en las relaciones personales.